octubre 29, 2010

Detalles erróneos


Me cuesta trabajo pensar en un final diferente para esta historia. Después de haber diseñado el plan A, B y el de escape junto a ti, ese pequeño detalle lo arruinó todo.

No dejo de pensar que haberte conocido una semana antes o una después hubiera sido suficiente para crear la mejor historia de amor o simplemente una amistad en la que los sentimientos —mis sentimientos— no se involucraran.

Ahora he vuelto a ese camino sin rumbo que había sido mi predilecto, he dejado de construir castillos en el aire y he sonreído otra vez de una manera fluida, sin vacilaciones… Cada grado de temperatura que desciende en este cuarto me quita como cincos segundos de amor.

octubre 18, 2010

Minutos perdidos


[12/Octubre]

10:31 Clase de Semiótica: me gusta, entiendo, pero esta semana ha sido horrible. Después de confusiones, pláticas, regaños, terapias y un cansancio imborrable, verte (aunque sea de lejitos) le da un no sé qué a lo aturdido de mis días. Sí, estoy como “nerviosita”. Quisiera estar cerca de ti, mínimo cruzar miradas. (Noté que me miras extraño, ¿será que ya sospechas?)

10:40 “Amanecerá y veremos”. Justo cuando termino de leer Las Fantásticas, vuelvo a pensar en ti. Esperanza, no me gusta esa palabra pero implica tanto… Ya casi acaba la clase y el calor humano está insoportable. Aún así, me encantas: tú y tu olor.

[13/Octubre]

20:20 Saliste a flote en una conversación. "No se deja". Sólo pude reír y cambiar la conversación.

[14/Octubre]

7:35 Acentos, gramática, gerundios: el desayuno fue un poco amargo. Es inevitable sentirme incómoda con el regaño (y un tanto aludida) aunque sé que he mejorado. Miedo. (No sales de mi mente, qué cursi)

7:46 "Te prometo que te la vas a pasar muy bien conmigo": seducir al lector. Sin palabras, tengo una sonrisa en la cara.

11:20 Ja, mi ojo.

12:17 ¡Mi cabeza! Ya no entiendo, ¿habrá sido indirecta o mera casualidad? Qué complicado

[15/Octubre]

7:24 Hace frío, mucho. Estoy sola, formada en una fila para pagar mis estudios. ¿Queratocono? La verdad sí tengo miedo, espero que todo esté bien. No he pensado en ti, no he tenido esa necesidad (si así le puede decir) de estar cerca de ti. Un sándwich me espera, al rato.

8:37 La música trance que emana de los audífonos no evita que me sienta mal, rodeada de tanta gente, con este frío insoportable y una extraña ansiedad. La topografía está hecha.

9:23 Odio los lentes de contacto.

9:50 ¡Qué guapos doctores!

12:10 No hubo sándwich, sigue cerrado. De cualquier manera hubiera huido de él, de sus brazos, de sus besos (aunque en realidad me hubiera encantado verlo). No tengo ninguna enfermedad horrible en los ojos, más que la imagen de unas botas que gritan: ¡Cómpranos!

15:48 Facultad: todo tranquilo, lo logré.

20:05 Aparentemente hoy recordé lo feliz que era mi vida antes de empezar a complicármela. Esas caminatas largas y tranquilas son lo mejor del mundo.

[16/Octubre]

14:06 Qué noche. Apareció una nueva ruta en mi vida.

19:47 Audirac no me deja ser feliz. ¿Por qué debe ser un fin se semana tan lleno de noticias? Lo odio.

20:15 Como pocas veces en la vida, deseo que sea lunes.

21:27 Me gustan esos cambios de vida, pero me hacen perder el control.

22:00 ¿Las notas tendrán un límite en extensión? (Él: me gusta)

[18/Octubre]

7:14 La nota del día. No sé si me importe.

8:02 Después de todo sí me importó. Tengo curiosidad, siento algo extraño y ya tengo sospechoso. En fin, mala nota (también en clase).

9:41 No puedo concentrarme. Benito Juárez y la financiación a los periódicos no son suficientes para que deje de pensar en que la historia tiende a ser una espiral: situaciones parecidas. Incomodidad emocional.

11:16 Muy fatídico el asunto, quiero llorar.


Una semana después: La euforia terminó y mis pies regresan al mundo real. La absurda pretensión de recapitular minutos sin sentido se ha esfumado. No más. Me he convencido de que ciertas noticias cambian por completo las historia. No estoy lista para el cambio de ésta.

octubre 04, 2010

Sensaciones


¿Amar? Hace tiempo que esa palabra dejó de tener el significado romántico que todos conocen o suponen. “Mi amor”, “nuestro amor” también dejó de ser ortodoxo. Él, el innombrable y desconocido se encontraba dormido sobre esas sábanas donde las manchas de cigarro, alcohol y muchas noches de pasión se mezclaban con el olor de nuestros cuerpos.

Luego de encontrarnos en aquella fiesta y de hacer “clic” justo después del primer beso, logramos escabullirnos y meternos en el hotel más cercano.

Eso nunca fue amor, sólo sexo.

Sin embargo, me encantaba acariciar tu rostro, tu cabello rizado y besar tus labios. Tú decías adorar cada parte de mí, me sorprendía la manera en la que “casualmente” siempre me encontrabas en extraños lugares.

Nadie amó, sólo sentimos. La nuestra fue una relación extraña pero funcional: entregada totalmente en la cama, distante e indispensable fuera de ella.

Las llamadas, mensajes, comidas y citas en el hotel se hicieron hábito.

Tu cuerpo torneado (con ese único defecto en tu brazo derecho, un tatuaje) embonaba perfecto en el mío. Cada momento cerca de ti era un paso más para llegar al éxtasis.